LA FELICIDAD Y LA ALEGRÍA

Ésta semana íbamos a trabajar la felicidad, pero viendo o difícil que es para los niños y no tan niños separar estas dos emociones que son parecidas, pero NO iguales, decidí trabajarlas las dos viendo sus semejanzas y similitudes. Ya vimos las semana pasada que la serenidad podía contribuir a la felicidad.

Primero como siempre les mostré ayer la imagen de la felicidad, y fue ahí donde me di cuenta que muchos niños me decían que era felicidad y otros alegría.
Imagen de la Felicidad:

Y esta es la imagen de la alegría: 

Vimos que la felicidad es una sensación de satisfacción hacia tu propia persona, es algo permanente en el tiempo. En cambio, la alegría (también llamada júbilo, contento o gozo) es causada por un motivo placentero, agradable, y es de corta duración. Es decir, que una persona puede no estar alegre todo el tiempo (todos tenemos altibajos emocionales y días o momentos de mayor energía y optimismo, y otros en que nos sentimos desmotivados o tristes por algún motivo), pero ser feliz en todo momento. Y al contrario, una persona que se siente infeliz durante un tiempo prolongado, puede vivir momentos de alegría.

A la hora de buscar experiencias en nuestras vidas de felicidad y alegría, les di vía libre para que hablaran sobre una u otra indistintamente, pero me fui dando cuenta de que no las diferenciaban (para ellos, montar en una montaña rusa les proporcionaba felicidad, cuando en realidad les proporciona alegría), así que entre todos hablamos de las cosas que nos hacen felices en general y luego ellos me contaron sus experiencias de alegría, ya que les resultaban mucho más fáciles de identificar.

En lo que estábamos todos de acuerdo es que nuestra familia nos proporciona felicidad. Y es que es uno de los pilares fundamentales en la vida, formar parte de nuestra familia, sentirnos amados, protegidos, cuidados... Y       contribuyó con algo importantísimo: ¡también queriendo nosotros a nuestra familia!. Pues claro que sí, y es que dar amor es algo que nos hace tremendamente felices.

Otro aspecto fundamental es hacer lo que a uno le gusta. Y no hablamos sólo de momentos de diversión o juego, sino que en la vida uno tiene que intentar invertir su tiempo en cosas que le gusten. A la hora de elegir un trabajo es fundamental que haya un componente motivacional, porque va a ser una lucha continua lograr la felicidad pasando tantas horas al día haciendo algo que no te gusta en absoluto, que no te motiva o que, incluso, te incomoda. Ellos, en cambio, no pueden elegir, porque ahora deben ir al colegio y estudiar, ese es su "trabajo". Pero también hay que aprender a disfrutar de las cosas que hacemos (siempre hay lado bueno y aspectos positivos) para contribuir a nuestra felicidad. Además, cumplir con sus obligaciones y estudiar, les proporcionará satisfacción personal, que contribuye muchísimo a la felicidad, les puse el ejemplo de cuando tienen la tarea hecha y entienden bien la lección les proporciona felicidad el saber que lo han entendido, frente a cuando no tienen la tarea hecha y no lo entienden están inseguros, con miedo de que les pregunte... etc.

Tampoco nos extendimos mucho más porque creo que el concepto de felicidad les resultaba algo complicado de entender.

Nos centramos después en la alegría (lo contrario de la tristeza).Y esto es lo que me contaron sobre las cosas que les hacen sentir alegres:

Ainara: Es feliz con su familia y siente alegría cuando se acerca la Navidad y los Reyes.
Ángel O: Es feliz porque va con Joel al colegio y le da alegría hablar con su primo por video-llamada.
Joel: Es feliz cuando cuando va al cole con Ángel -Lo que se quieren estos chicos- y se siente alegre cuando le hacen un regalo.
Nerea: Siente alegría cuando me da un abrazo - 💚💓💗- y es feliz cuando ve a su prima y está con su familia.
Abel: Es feliz cuando está con su hermano Erick, y siente alegría cuando los reyes le traen lo que ha pedido. -Que listos son estos reyes-.
Marta: Es feliz cuando está con su familia, y siente alegría cuando en Navidad ve a sus primos y está con su familia.
Blanca: Es feliz cuando está con su familia y se cuentan cosas, y sintió alegría cuando le regalaron un Karaoque.
Lola: Es feliz cuando está con su familia y hace puzzles, y siente alegría cuando pone los adornos de Navidad.
Dina: es feliz cuando su maestro de ciencias le sonríe - yo dije que esto iba a salir en el blog, pero le hacía hasta ilusión, ja ja, ya empezamos con los primeros amores-. y siente alegría cuando su hermana le explica las cosas del cole con mucho cariño.
Valeria: Siente alegría porque va a tener un herman@ - aún no sabemos qué será 💗 - Y se seinte feliz con su famlia y sus primos.
Brayan: Se siente feliz cuando está con su familia en Navidad, y siente alegría cuando viene su prima Ursula.
Ángel N: Se siente feliz cuando está jugando con sus padres y siente alegría cuando habla con su padre de sus cosas.
Nuria: Es feliz cuando se junta toda la familia en Navidad y siente alegría cuando viene Papá Noél.
Vera: Es feliz cuando en Navidad visita a toda su familia y siente alegría cuando viene Papá Noél.
Rebeca: Es feliz cuando está con su gato, y siente alegría cuando va a casa de su prima.
Rubén M. Gil: Sintió alegría cuando le regalaron una NERF - no tenía ni idea que eso era una pistola de agua - y es feliz con su familia.
Michelle: Es feliz cuando está con su familia en Navidad y siente alegría cuando ve a sus primos.
Carla: Es feliz cuando ve a su prima de Madrid, y siente alegría cuando va a ballet.
Sara: Es feliz cuando está en familia y siente la alegría cuando le regalan algo.

La mayoría son felices con su familia. Que bonito es esto, ¿no?, que importante es la familia.

Me pareció una buena idea para terminar por ver está emoción enseñarles el cortometraje del vendedor de humo, cuenta la historia de un embaucador que disfrazado de vendedor ambulante llega a un pequeño pueblo ofreciendo una atractiva mercancía: un elixir para hacer realidad los sueños de los habitantes. Como si fuera un vendedor de jarabe milagroso o un curalotodo, el protagonista de este cortometraje es recibido por los lugareños con cierta distancia, como si fuera un charlatán más de los que llegan de ciento en viento por el pueblo. No obstante, las reticencias se deben no sólo al escepticismo que suele caracterizar a las personas que viven en el mundo rural y lugares alejados de núcleos urbanos, sino también a la desconfianza que generan quienes quieren convencer de algo a los demás a toda costa. Con todo, la gente de este pueblo remoto parece reaccionar al hechizo y ensueño que ofrece este vendedor que, finalmente, resulta ser un timador. En otro nivel de interpretación, este corto es una sutil parodia del efecto del lenguaje publicitario y la propaganda política en la actualidad.

Pero explicar todos estos conceptos a los niños, no siempre es fácil. Es necesario que sepamos hablarles de esos instantes en los que nos creemos felices tras cumplirse nuestro sueño, pero que, en el fondo está lleno de vacío y fugacidad. Así conseguiremos que, por un lado no se conviertan en seres inmersos en el materialismo y, también, que no se dejen engañar por la brillantez hueca del humo. Y esto es lo que viene a contarnos, a grandes rasgos, este hermoso cortometraje titulado “El Vendedor de humo”.
El cortometraje «El vendedor de humo» de Jaime Maestro Sellés (Escuela Valenciana de Cine PrimerFrame, 2012) fue ganador del Premio Goya 2013 al Mejor Cortometraje de Animación, un merecido galardón a una película que habla de los sueños, las ilusiones de la gente y del engaño en el mundo actual.